9/3/09
MÁS QUE ALUMNO, UN DISCIPULO
Versículo Clave:
Entonces Jesús dijo a sus discípulos:
Si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a si mismo
Y tome su cruz y sígame
(Mateo 16:24)
A-) EL DISCIPULO: LLAMADO Y EQUIPADO
Han pasado más de 2000 años desde que el Señor Jesucristo llamo a sus discípulos y los envío a predicar el sagrado evangelio de Dios para el perdón de pecados y vida eterna. Hoy esto no ha cambiado, pues sigue llamando a sus hijos y espera que sus hijos respondan al llamado. Si tu eres su hijo de Dios, entonces estas siendo llamado “TODOS LOS HIJOS DE DIOS SON LLAMADOS” a predicar el evangelio.
(Mateo 10:1-15)
El Señor Jesucristo tuvo mucha gente a su alrededor, escucho de mucha gente decirle “te seguiré donde quiera que vayas”, muchas personas anduvieron detrás de el: Curiosos, admiradores, oportunistas, necesitados, convencidos, etc. Hombres y mujeres que necesitaban algo de el.
Pero dentro de toda esa multitud habían 12 que destacaban de todos los demás, doce hombres con características especiales, hombres QUE JESUS LLAMO (Mateo 10:1). Esto es extraño por que en esos tiempos eran los judíos los que elegían a quienes seguían y a que maestro escuchaban. Jesús los llama y lo hace conociéndolos; eso quiere decir que el conocía sus debilidades, el conocía sus fortalezas, el conocía sus capacidades y sus limitaciones, pero Cristo no llama pensando en los errores del pasado ni en las limitaciones presentes, no ve a un Simon Pedro agresivo e impetuoso, ni a un Mateo publicano opresor del pueblo, ni tampoco a un Judas astuto y oportunista. Solo ve a hombres como cualquiera que en sus manos llegaran a ser la base de la obra.
Cuando Dios llama, el también capacita y te da poder para hacer cosas que en tu humanidad te es imposible (Filipenses 4:13) (Romanos 1:16) (eso es lo que el texto bíblico nos demuestra) y no tan solo capacita, si no que también te da autoridad para hacerlo y el que te encomienda es el mismo y te da ordenes de cómo debes hacerlo.
Tus limitaciones, tus fracasos, tus errores e incapacidades Dios las utiliza y es allí donde el se glorifica (2 Corintios 12:9-10) (I Corintios 1:26-29).
Jesús los llama, los equipa, les da autoridad y capacita para luego enviarlos con su mensaje, pero es obvio que para ser apóstoles, primero debían ser discípulos. Primero tenían que recibir para luego poder dar. Y los capacita de tal forma que pueden enfrentar sus responsabilidades con la absoluta convicción de que su Señor va a acompañarles y proveer para cada una de sus necesidades. Sus discípulos deben despojarse de todo peso, de todo lo que no sirve o esta de más (como 2 túnicas, alforja, etc.) (Mateo 10:9-10). Dios ha sido fiel sustentando a aquellos que a lo largo de la historia el ha llamado, por lo cual el discípulo de hoy puede estar seguro que el Señor lo seguirá haciendo.
B-) EL DISCIPULO: COMPROMETIDO
(Mateo 16:24)
Habiendo ya establecido que Cristo es quien llama a sus discípulos, que los capacita y sustenta en la misión que les encomienda, veamos el tipo de compromiso que Jesús espera de sus discípulos.
Después de anunciar lo que le espera en Jerusalén, Jesús dice a sus discípulos que ese mismo camino deben recorrer si desean ser verdaderos discípulos. Pero Jesús sabe cuan difíciles son estas palabras y en el versículo 24 le da tres condiciones para poder seguirle en forma autentica. Antes de verlas analicemos la primera frase de este versículo.
“Si alguno quiere venir en pos de mi”
Dijimos en la primera parte que Jesús era quien elegía a sus discípulos, pero eso no quita que nosotros tengamos un libre albedrío que nos permite tomar la decisión por nuestra cuenta. Jesús nos llama, Jesús nos busca, Jesús nos invita y nosotros decidimos si obedecemos o no lo hacemos.
“En pos de mi”
Una frase que denota seguimiento. Somos invitados a seguirle, a comprometernos, pues hay una diferencia entre discípulos y apóstoles, entre alumnos y discípulos, veamos a cada una de ellas.
UN ALUMNO:
- Aprende de un maestro
- Todo es para su conveniencia
- Se invierte en el
- Asiste a una sala, salón de clase o templo
UN DISCIPULO
- Pone en practica lo que su maestro le enseño
- Vive por otros y para el bien de los de mas
- Invierte en la obra
- Su salón de clases es la obra misma y sus experiencias.
La diferencia entre alumno y discípulo es que aun recibiendo la misma instrucción, el discípulo se compromete con las enseñanzas de su maestro. El ser discípulo significa COMPROMISO, si no te comprometes ERES UN SIMPLE ALUMNO.
Ahora si, veamos las condiciones de Jesús para los que quieren seguirle, para los que quieren ser sus discípulos.
1- ) NIEGUESE A SI MISMO
Con estas palabras Jesús expresa que quienes han de seguirle deben dejar su independencia y someterse en dependencia absoluta del Señor. Es el sometimiento de la voluntad del hombre (de tu voluntad) a la voluntad de Dios, es el camino a la restauración de la imagen de Dios en el hombre (aquella imagen que Adán arruino)
2- ) TOME SU CRUZ
La cruz es símbolo de escarnio, sufrimiento y abandono. Es todo aquello que debemos soportar, enfrentar y vencer por seguir a Cristo. Debemos tomar el peso y cargarlo, llevarlo hasta lo más alto para que todos los pecadores vean la cruz de Jesús. (Mateo 11:28-30)
3- ) SIGAME
Jesús espera el compromiso del hombre con el, con su obra, con su propósito para el mundo, Cristo espera compromiso por parte de sus alumnos para poder llegar a ser discípulos, en esta ultima parte se espera de nosotros que dejemos nuestro camino por el que íbamos (como Pablo en damasco y Bartimeo el ciego) para seguir en su camino a Jesús.
Jesús continua llamando personas para que le sigan, para que se comprometan con su persona, Cristo desea tener DISCIPULOS EN TODO EL MUNDO, POR TODAS PARTES, por que al igual que en los tiempos del Señor SON MUCHOS LOS SEGUIDORES Y MUCHOS LOS ALUMNOS, PERO POCO SUS DISCIPULOS, nos toca escuchar la voz de Dios diciendo “VEN TOMA TU CRUZ, NIEGATE A TI MISMO Y SIGUEME, se MAS QUE UN ALUMNO, SE UN DISCIPULO.
1 comentarios:
gracias a ti por la respuesta. me ayudo mucho
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